Ingredientes
1 durazno fresco maduro
120 ml de prosecco o vino espumoso seco
30 ml de puré de durazno (opcional)
hielo picado
Instrucciones
Pelar el durazno y cortarlo en trocitos pequeños. Tritúralo hasta obtener una
textura suave y sin grumos.
Si desea un toque extra de sabor, puede agregar el puré de durazno al triturado.
Llena una copa de champagne hasta la mitad con hielo picado.
Vierte el puré de durazno (o el durazno triturado) sobre el hielo.
Completa la copa con prosecco o vino espumoso seco, removiendo suavemente para
mezclar los ingredientes.
Decora con una rodaja de durazno o una hoja de menta, ¡y listo para disfrutar!
Presentación
El Bellini es una bebida reconocida por su aspecto vibrante y su atractivo visual.
Se sirve en una copa de champagne o en una flauta, resaltando su elegancia y
sofisticación. La presentación clásica del Bellini incluye una mezcla de champagne
frío y puré de durazno fresco. La combinación de colores entre el dorado del
champagne y el tono rosado o anaranjado del jugo de durazno crea una estética
llamativa y apetitosa. A menudo, se adorna el borde de la copa con un trozo de
durazno o una cereza, lo que añade un toque de decoración y realza aún más su
presentación.
Origen
El Bellini tiene su origen en la ciudad de Venecia, Italia, y fue creado por
Giuseppe Cipriani, fundador del famoso Harry's Bar en 1931. Cipriani fue un
visionario en la industria de la coctelería y se inspiró en los colores del
pintor renacentista Giovanni Bellini para crear esta deliciosa bebida. Utilizó
duraznos blancos de la región de Emilia-Romaña, conocidos por su sabor dulce y
aromático, para elaborar un puré suave y sedoso que se mezclaba con champagne.
El resultado fue una combinación de sabores única y refrescante que cautivó a
los clientes del Harry's Bar y que rápidamente se hizo popular en la escena de
los cócteles en Venecia.
El éxito del Bellini se romperá rápidamente más allá de las fronteras de Italia.
Celebridades, artistas y viajeros internacionales comenzaron a visitar el Harry's
Bar para degustar esta exquisita bebida. Su fama creció aún más cuando Ernest
Hemingway, el famoso escritor estadounidense, se convirtió en un asiduo cliente
del bar y popularizó el Bellini en los Estados Unidos. A partir de ese momento,
el Bellini se convirtió en un cóctel clásico que se mantuvo en bares y
restaurantes de todo el mundo.
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